Antes de que Otter viera la luz y compartíamos nuestra idea con nuestras 3F (friends, family & fools) nos dimos cuenta de lo habitual que era tener ideas (de muebles) en stand by por no tener el tiempo de pasearse por el barrio o ciudad en busca del carpintero ideal, o simplemente por no saber por dónde empezar.
Producción
7 días
Presupuesto
350€
Material
Madera de pino
Esa fue una de las razones por las que empezamos a dar vueltas a cómo aproximar a carpinteros y a sus futuros clientes en un mismo lugar (digital) para que fuera más fácil dar forma a los objetos, muebles o proyectos a medida que nos podamos imaginar y que pueden ver la luz de la mano de un carpintero.
En el caso de Silvia había parte de esto y también el hecho de que ella había crecido al lado de un carpintero, su padre, al cual en esta ocasión quería "liberar" de llevar a cabo su idea. Así que por primera vez decidió buscar a un carpintero y fue así como encontró nuestra propuesta (¡gracias Google!)
La idea
Silvia fue muy clara y concisa en su mensaje en el formulario. Quería una mesa de 4 patas, de 80cm x 50cm x 35cm, estilo madera envejecida y decapado blanco. Ya le había dado muchas vueltas a qué diseño necesitaba para tener una mesa de centro que no se comiera el espacio reducido de esa zona de su salón, y a la vez contrastara con el resto de muebles color cerezo que tiene.
A Zach le encanta hacer mesas y aparadores sencillos, rústicos y con un toque moderno así que era un encargo a medida para él también.
Con la idea que tenía Silvia para la mesa y las referencias de estilo que nos dió... ¿quién mejor que Zach para dar forma a su idea?
Manos a la obra
La clave para Zach para poder empezar este proyecto con buen pie era encontrar la madera adecuada que le permitiera conseguir la estética de madera vieja o reciclada que quería Silvia. Fue todo un golpe de suerte que pudiera encontrar unos tablones de madera de pino recuperada ideales para hacer la mesa.
Es fácil pensar que cuando se trata de hacer muebles con una estética envejecida o madera reciclada lleva menos tiempo, y es justo al contrario ya que la madera hay que tratarla mucho más por lo que implica muchas más horas en el proceso de producción.
Aunque a primera vista este encargo parecía sencillo el acabado decapado era un aspecto sensible en el proceso. Cada decapado es diferente y cada uno tiene una idea en mente de cómo lo imagina que no tiene por qué coincidir luego con el acabado real. Para Zach el reto era conseguir que el decapado tuviera el tono justo que quería Silvia, así que para asegurarse de ello era importante visualizar lo mejor posible cómo lo imaginaba Silvia y a partir de ahí tener una buena comunicación con ella para que viera cómo iba siendo el proceso y evitar sorpresas el día de la entrega.
Zach: “Siempre aprendo algo nuevo con cada proyecto. Hacer una patas con una nueva forma, hacer un tipo de mueble que no he hecho antes, o conseguir el decapado exacto que quiere el cliente. ¡Es interesante tener proyectos así!”
El resultado
Para que Silvia pudiera ver el resultado antes de la entrega y hacer cualquier ajuste si era necesario Zach envió fotos de un primer decapado más ligero para a partir de ahí hacerlo más intenso o no. En esta primera prueba a Silvia le pareció que el acabado había quedado demasiado blanco y quería que la beta de la madera se pudiera apreciar más. Así que Zach fue trabajando el decapado en varias fases hasta que para Silvia estuvo en el punto perfecto.
Las dimensiones de la mesa permitieron que Silvia pudiera ir a recogerla ella misma al taller de Zach. Otter es para los carpinteros una plataforma de apoyo no solamente para encontrar a clientes afines sino también para la gestión del proyecto y dar soporte siempre que sea necesario. En este caso Zach no estaba disponible el único día que Silvia podía ir a recoger la mesa así que fuimos nosotros a recibirla al taller de Zach y entregarle su mesa.
Nos encanta conocer personalmente a nuestros usuarios. Nos permite aprender mucho más del proceso y tener feedback directo de las personas que han tenido una experiencia en Otter. Cuando Silvia vio finalmente su mesa fue amor a primera vista así que nos alegró estar allí para verlo. ¡Gracias Silvia por confiar en Otter!
Zach: “Este proyecto ha sido el ejemplo perfecto de que con una buena comunicación es posible hacer un mueble a medida sin moverse de casa. Todo el diálogo con el cliente fue digital y solo tuvo que venir al taller a recoger el mueble.”